Por lo general, el tiempo que dura la inspección oscila entre los 10 y 15 minutos. Los fallos más frecuentes están relacionados con la suspensión, dirección y frenos por lo que es recomendable que revises estos elementos antes de acudir a la ITV. Que los defectos sean leves o graves depende del peligro que puedan entrañar para la seguridad vial y del propio conductor. El procedimiento que se sigue es el siguiente:
Al llegar al centro de inspección, es imprescindible que presentes los originales de la Tarjeta de Inspección Técnica y el Permiso de Circulación, es importante llevar el seguro ya que sera mas facil para la persona que esté en la oficina identificar tu vehículo y tus datos.
Cuando te llega el turno, lo primero que hace el técnico es identificar tu vehículo comprobando que su marca, tipo, número de bastidor que es importante saber dónde la lleva colocada su vehículo normalmente la placa de bastidor se puede ver dónde la lleva en el manual del vehículo y por último que matrícula coinciden con los datos que aparecen en la documentación del mismo. A su vez, revisa el estado del interior -funcionamiento de puertas, ventanillas y cierres, anclaje de cinturones de seguridad, espejo retrovisor, visibilidad en general, apoyacabezas, aristas y volante- y del exterior -placas de matrícula, espejos retrovisores, limpiaparabrisas y guardabarros-. A continuación, se verifica la alineación de las luces de largo y corto alcance, y la intensidad e inclinación del haz luminoso. Además, se comprueba el correcto funcionamiento de las restantes indicaciones luminosas y de señalización, en este momento el inspector te irá indicando instrucciones de las luces que tienes que ir encendiendo. En un tercer nivel, le toca el turno al estado del sistema de frenos de ambos ejes. Con la ayuda de un frenómetro de rodillo se comprueba que las fuerzas de frenado entre ruedas de un mismo eje no difieran entre sí más de un 30 por ciento, en el momento que te hagan esta comprobación el coche dará un pequeño movimiento hacia atrás . En el siguiente punto, el vehículo se sitúa sobre un foso o elevador, donde, gracias a unas placas de detección, se comprueban las posibles holguras en la dirección y todos sus elementos,en los cuales el inspector te ordenada que muevas el volante de un lado hacia el otro y aparte cuando te compruebe las holguras y el estado de las suspensiones el coche te temblara un poco. A continuación se verifican los bajos, el bastidor, la carrocería, el depósito de combustible, el líquido de frenos, el tubo de escape, la transmisión, posibles pérdidas de aceite, deterioro de componentes mecánicos, nivel de ruidos, el estado de desgaste de los neumáticos. |